«Es el final de Alberto». Esto nos dijo una fuente cercana sobre el hecho de presunta violencia que Alberto Fernández habría ejercido contra su ex pareja Fabiola Yáñez. La verdad es que Alberto Fernández era como un artículo de decoración que te regalan y no sabés donde ponerlo. Pero llegó este bombazo y lo ubico en lo más bajo de todo. Además de ser el peor presidente de la historia democrática de la Argentina además es un presunto golpeador de mujeres.

Ahora bien. La Cámpora, rama progresista y radical del kirchnerismo, conducida por el Cuervo Larroque y Máximo Kirchner, encontró la manera de poner como víctima a Cristina Kirchner. No soportan no ser el centro de atención. No soportan que Axel Kicillof, gobernador de la provincia, supuestamente peronista, quiera sacárselos de encima para armar su estructura de poder para el 2027. Y sin CFK, la Cámpora no existe. No tiene cuadros políticos de importancia. A punto tal que la dirigente más destacada de la organización es Mayra Mendoza, Intendente de Quilmes.

Por eso, revictimizan, tanto que le gusta a los progres de Palermo Rúcula usar ese término a «mi querida Fabiola» para poner en lugar central a Cristina, a la que quisieron matar, a la que le tiraron un piedrazo a la oficina, al centro total del universo, pero que ya el pueblo argentino no quiere ni ver.

«Cristina sufrió violencia por parte de Alberto Fernández», realmente insólito.

Alejandro Cabrera | Redactor, conductor y periodista de Periodismo y Punto. Coordinador general del medio.